Crónica de la visita de Carla Movellán Salán (2º ESO B)
El
pasado 2 de mayo a las 10.30 horas de la mañana los alumnos de 2º ESO B de
Religión fuimos andando hasta la Cocina Económica de Santander, ubicada en la
calle Tantín.
Cuando
llegamos nos recibió Rubén, uno de los educadores sociales del centro, que nos
explicó un poco la historia de esta cocina y nos enseñó sus instalaciones.
Primero nos llevó a ver el comedor, por donde pasan a diario unas 275 personas.
Para poder acudir tienen que cumplir una serie de requisitos: estar apuntado en
una lista y tener su huella dactilar incorporada en un dispositivo de
reconocimiento. En el comedor hay carteles de las distintas actividades que pueden hacer para
mantenerse entretenidos, porque la cocina económica no solo les da de comer
sino que también propone otro tipo de actividades. Todo estaba impecable: no
había nada de suciedad y esto es gracias al trabajo de todos los voluntarios
que trabajan allí.
Foto de uno de los grupos de 2º ESO en la cocina económica. |
Luego,
Rubén nos llevó a la cocina, donde se sirven diferentes tipos de comida para
que le gente pueda elegir. Además, proporcionan comida especial a los
musulmanes que no pueden comer carne de cerdo por su religión. Más tarde
bajamos a la capilla, la cual, gracias a la amabilidad de las monjas, también
se usa como cine. Nos enseñó también el almacén en el que guardaban y etiquetaban
los alimentos comprados con donaciones, subvenciones y ayuda de otras personas.
Rosa,
nuestra profesora de Religión, nos contó que algunas personas, a las que les da
mucha vergüenza entrar a por la comida al comedor, van a la parte trasera del
edificio para que nadie los vea y la recogen allí.
Lo
siguiente que hicimos fue ir a la lavandería, donde lavan y planchan la ropa de
la gente que lo necesita (a veces incluso también les dan ropa si lo
necesitan). Después fuimos a ver el economato, que es una pequeña tienda a la
que acuden quinientas familias diariamente a hacer sus compras a base de puntos
que les dan en la parroquia. Allí, una de las trabajadoras nos contó su
historia: cómo encontró la fe y cómo después de ser profesora de Matemáticas
pasó a trabajar en la cocina económica.
Crónica de la visita de
Alicia Villar Gómez (2º ESO B)
La
cocina económica es un lugar maravilloso donde ayudan a gente sin recursos o
con problemas económicos. Al
llegar nos explicaron un poco qué hacían y quién lo había fundado, y cuántos
años llevaban ayudando a las personas. Allí
no solo se daba de comer: también se hacían distintas actividades porque la
gente de la calle tiene mucho tiempo libre.
Nos
enseñaron la cocina donde cocinaban y el comedor donde daban de comer a la
gente. El comedor era grande y con mesas redondas. Más tarde fuimos a la
capilla y nos dijeron que había misas los domingos y también la utilizaban como
sala de cine. Después fuimos al almacén donde había toneladas de comida ya que
era muy grande. También
nos enseñaron el economato, un supermercado donde compraban la comida con
puntos que les daban en la parroquia. Había
variedades de talleres como clases de inglés, talleres de costura,
encuadernación, alpargatas...
He
quedado muy sorprendida después de la visita porque yo pensaba que solo daban
de comer pero hacen muchas cosas más para ayudar. Me encantaría volver a visitarla.
Foto del otro grupo de 2º ESO, acompañados por Rosa y Javi. |
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